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El Ajuntament de Palma prepara un documento que le servirá de base para reorganizar en un futuro las líneas de la Empresa Municipal de Transportes (EMT). El estudio estará terminado antes de que finalice el año y responde a un cambio en la configuración de Palma, motivado por el crecimiento de las construcciones y aumento de la población en el extrarradio de Ciutat. A ello habrá que sumar actuaciones como el futuro metro de la Universitat de les Illes Baleares, que también podría afectar a horario y frecuencias y número de autobuses de la flota de la empresa municipal que realicen este recorrido. «Estamos haciendo un estudio de cómo se verá afectado el transporte público en los próximos diez años. Hasta final de este año no sabremos las necesidades de la EMT para poder adaptarlas a la nueva realidad. Los cambios apuntarían, por ejemplo, a la zona que se encuentra detrás de la Vía de Cintura, que está creciendo mucho y nos obligará a modificar usos. También la línea 14 que une Son Ferriol y s'Aranjassa. También, en un futuro, podrían verse afectadas las líneas 3, 5, 7 y 8. En general, puede afectar a todas las líneas, excepto a los de la zona centro, que ya no crecerá más», afirma Àlvaro Gijón, concejal de Trànsit i Transports del Ajuntament de Palma.

El concejal señaló que «actualmente la ocupación media de la EMT se sitúa en el 50 por ciento. Todavía tenemos capacidad de crecimiento, pero lo que nos interesa saber es cómo va a evolucionar Palma en los próximos años para poder ir adaptándonos», añade Gijón. «A final de la calle Aragón puede haber construidas alrededor de quinientas viviendas más, lo que significa alrededor de 2.000 personas en un punto concreto. Las zonas más afectadas por el crecimiento de la población y la futura reorganización de la flota serán las barriadas de Palma», afirma el concejal de Trànsit i Transports.