Nekane Domblás29/03/05 0:00
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El Govern balear invertirá 7,5 millones de euros en la construcción de centros para personas discapacitadas una vez que la consellera de Presidència, Rosa Puig, haya actualizado el decreto de atención a las personas que presentan algún tipo de problema de este tipo. Según un comunicado remitido ayer por la Conselleria de Presidència, el borrador del decreto se ha presentado ante la Conferencia Sectorial de Servicios Sociales, en la que participan los tres consells insulars. El decreto incluye una nueva regulación especialmente para Menorca y Eivissa ya que permitirá a sus respectivos consells cambiar el antiguo sistema de subvención por el concertación de plazas, como ya sucede en el caso de Mallorca.

La Conselleria que dirige Rosa Puig estima que en Balears viven 38.312 personas que presentan algún tipo de discapacidad, de las 33.098 residen en la isla de Mallorca; 2.247 viven en Menorca y otras 2.871, en Eivissa y Formentera. El anteproyecto de decreto que ya ha entregado a la consellera a los consells permitirá regular los servicios sociales dirigidos a las personas en situación de dependencia «entendiéndose como tal el estado en que se encuentran personas que, por ausencia o pérdida de autonomía física, psíquica o intelectual, tienen necesidad de asistencia o de ayudas importantes por realizar los actos habituales de la vida diaria».

El comunicado remitido por la Conselleria señala que el concepto «dependencia» es totalmente innovador ya que en la legislación que se aplicaba hasta el momento se introducía el elemento «discapacidad». Este cambio permitirá ajustar los servicios sociales a las necesidades concretas de las personas que necesitan hacer uso de ellos. El decreto establece que los usuarios de estos servicios tendrán el derecho de acceder a ellos en condición de igualdad, con la única salvedad de que se tendrá en cuenta el diferente grado de dependencia que presente cada uno de ellos. Por lo que respecta al criterio de acceso a los centros, el texto incluye la posibilidad de fijar cambios en función de la evolución y de la situación del usuario.