TW
0

La presencia de mujeres, jóvenes y niñas en los desfiles penitenciales de Semana Santa son un hecho constatado. Desde hace más de una década irrumpieron con fuerza en las distintas cofradías y son las que han dado realce a las procesiones.

Desde el presidente de la Asociación de Cofradías, Tomás Darder, a todos y cada uno de los presidentes de las cofradías va la unanimidad en la respuesta: «Si no fuera por ellas...». Y es que las mujeres realizan varias actividades que van desde su participación como penitentes, portando estandartes, empujando algunos pasos, y por último como «monaguillos».

El presidente de la cofradía Nuestro Padre Jesús Nazareno, Vicente Moyá, señaló que «me siento muy orgulloso de tenerlas en mi formación. Fuimos de los primeros en incorporarlas y la verdad es que no tengo ninguna queja. Cada año se van sumando nuevas cofrades, lo que es muy positivo para la cofradía».

Miguel Llabata, de la cofradía Las Cinco Llagas, también se mostró muy satisfecho con la participación de las mujeres: «En estos últimos años ha aumentado su presencia y espero que no pare».

En la cofradía Santa Mónica hay muchas mujeres. Su presidenta, Mónica Bellinfante, indicó que «un sesenta por ciento son mujeres, y se van incorporando varias cada año. También tenemos una banda juvenil en la que participan mujeres y tienen mucho interés en aprender y participar».

Quien también se muestra orgulloso de sus cofrades femeninas es Pep Serra, presidente de la cofradía, Cruz de Calatrava: «Estos últimos años se han ido incorporando muchas y la pequeña Laura, de un añito de edad, es la más joven».

También en la cofradía La Agonía se cuentan en buen número. El pasado domingo de ramos participaron en la procesión y la más pequeña acompañó al portador del estandarte con su palma labrada y el chupete.

En la de la Santa Faz cuentan con una cofrade especial. Se trata de la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, que participa junto a su marido y sus tres hijas, que son «monaguillas».