El actor americano Michael Douglas se convirtió ayer en el
principal protagonista en la feria Fitur de Madrid, al conseguir el
éxito mediático que esperaba el Govern, apadrinar la tarjeta verde
de la Fundación para el Desarrollo Sostenible de Balears y alabar
la estrategia y posicionamiento de la población de las Islas por la
defensa del medio ambiente.
Douglas, ante cerca de un centenar de medios de comunicación de
todo el país y corresponsales extranjeros, defendió el destino
turístico balear, en concreto Mallorca «por la diversidad
existente, más allá del sol y la playa, como la cultura, el entorno
natural, la gastronomía, y por tener otras muchas cosas... como
ahora la nieve. Me llena de orgullo que Balears haya apostado por
el medio ambiente. Me siento muy orgulloso de que Costa Nord sea la
sede de la Fundación para el Desarrollo Sostenible». Y tuvo,
asimismo, palabras de enhorabuena para el centenario del Fomento
del Turismo de Mallorca. Acabada su intervención hubo una conexión
en directo con Valldemossa, donde todos los presentes pudieron ver
la nieve y la cara de sorpresa que ponía Douglas ante tal
imagen.
El presidente del Govern, Jaume Matas, aprovechó el efecto
mediático de Douglas para dar unas pinceladas de lo que será la
tarjeta verde y anunciar que durante todo este año, «por cada
tarjeta verde que se venda, se dará un euro al fondo de solidaridad
para la reconstrucción de una de las zonas afectadas por el tsunami
en el sudeste asiático. La OMT ha pedido a la comunidad
internacional donativos y Balears, en este lanzamiento de la
tarjeta verde, aportará fondos con la comercialización de este
nuevo producto que estará en vigor a partir del próximo 15 de
abril».
El delegado del Gobierno, Ramón Socias, alabó el gesto del
Govern y obvió realizar cualquier tipo de crítica a la estrategia
turística del Ejecutivo que preside Matas, «porque en Fitur estamos
para promocionar las Islas y hay otros foros en donde se puede
discutir la efectividad de la tarjeta verde. Creo que la
participación de Douglas tendrá un efecto promocional importante».
El secretario general del PSIB, Francesc Antich, por su parte,
exigió que dicha tarjeta «sea realmente verde «porque en caso
contrario no será efectiva». Y el ex conseller de Turisme, Celestí
Alomar, se mostró excéptico sobre su funcionamiento y que pueda
recaudar lo mismo que la ecotasa.
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