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La diabetes es una enfermedad grave, que afecta entre un 6 y un 9 por ciento de la población, y que irá en aumento si no se adoptan medidas sanitarias de prevención. Esta es una de las principales conclusiones en la que coincidieron los tres médicos especialistas que ayer protagonizaron la jornada dedicada a la prevención de la diabetes, que se celebró en Es Baluard, y que organizaba la Fundación Areces y eClub Ultima Hora.

Aina Castillo, consellera de Sanitat, fue la encargada de inaugurar esta jornada divulgativa, que ha sido coordinada por el doctor Julio R. Villanueva, vicepresidente del comité científico de la Fundación Areces. Villanueva explicó la labor que realiza esta fundación en apoyo a la investigación científica y destacó el gran nivel de los tres médicos que intervinieron en esta jornada, los doctores Albert Goday, José Antonio Vázquez y Rafael Bengoa.

La consellera Aina Castillo alertó de que en estos momentos existen muchos casos de diabetes sin diagnosticar. Destacó la importancia de que se organicen jornadas como la de ayer para profundizar sobre esta enfermedad, que ayudan a la prevención. «La diabetes cada vez afecta a personas más jóvenes y amenaza la calidad de vida de los ciudadanos». Castillo explicó que el 6% del presupuesto sanitario se dedica a esta enfermedad.

Al margen del gasto millonario que arrastra la diabetes los tres expertos alertaron de que es una enfermedad, que no sólo no se estanca, sino que el número de pacientes va en aumento. De hecho, se calcula que dentro de 25 años el número de personas, sobre todo en edades avanzadas, que sufrirán esta enfermedad alcanzará los 360 millones de personas. Estas cifras hablan por sí solas, por lo que los médicos pretenden concienciar que la diabetes es una enfermedad grave y que se justifica un cambio en la política sanitaria que vaya dirigida hacia la prevención. «La diabetes supondrá una grave epidemia en el siglo XXI». Así de drástico se manifestó el doctor Albert Goday, coordinador del Grupo de Epidemiología del Hospital del Mar de Barcelona, que detalló los efectos secundarios que conlleva esta enfermedad, y que en estos momentos la sitúan en la primera causa de la ceguera, la insuficiencia renal o la amputación no traumática de algún miembro.