Los municipios pagan un sobrecoste de seis millones de euros por no mejorar su gestión de residuos

Guillem Riera, director insular de Gestió de Residus, ha explicado que «el incremento de la recogida selectiva de residuos no es ningún capricho ni un gesto de cara a la galería. Tiene una incidencia económica directa en lo que pagan los ayuntamientos por la incineración, gasto que es repercutido sobre los ciudadanos. Cuanto menos se selecciona, más se lleva a incinerar y, por tanto, más se paga».

Según los cálculos del Consell, «un paso más en la selección de residuos en sus cuatro fracciones -papel, cartón, envases y vidrio- supondría un ahorro de seis euros por habitante y año. Estas cantidades obedecen a algunas experiencias que ya hemos puesto en marcha. En Pollença, por ejemplo, con un pequeño esfuerzo en selección de residuos, el ayuntamiento se ha ahorrado más de 100.000 euros en una población de unos 15.000 habitantes. La media de ahorro sería de seis euros por habitante y año. En toda la Isla se podría conseguir un ahorro mínimo para el conjunto de las arcas municipales de 6 millones de euros, una cantidad que no sería necesario trasladar a los ciudadanos. Cuanto más se avance en la recogida selectiva, mayor será el ahorro», apunta el director insular.

Riera reconoce que se ha adelantado mucho en reducción, selección y reciclaje de residuos durante los últimos años, pero sigue notando «una cierta relajación o despreocupación en algunos ayuntamientos que no se toman en serio una cuestión que afecta directamente a sus recursos económicos».