TW
0

El Club Elsa estrenó ayer local en el recinto de Fires i Congressos para celebrar su tradicional rastrillo benéfico anual, que organizado para los días 29, 30 y 31 con el fin de recaudar los fondos necesarios para poder seguir socorriendo a todas las personas marginadas o sin recursos que acuden a la asociación desde su fundación, en 1977.

Entre el género expuesto para su venta destaca como siempre la abundancia de ropa de todo tipo, desde jerseys a pantalones o mantas y vestimenta infantil. El predominio del tema textil se combina con vajillas, bisutería y objetos de decoración, junto a algunos muebles, como mesas y sillas antiguas y tocadores, que atrajeron ayer la atención de los primeros visitantes, que este año disponen de un espacio mucho más amplio que en las ediciones anteriores, ubicadas en el Pueblo Español. Novedad que permite una mayor movilidad por parte del público asistente y a su vez un mayor campo visual a la hora de decantarse por un género u otro de los diversos productos en exposición en la gran superficie que ocupa el recinto ferial.

Al acto, coordinado por su presidenta, Juana C.M. de Walker, asistieron la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, y la vicepresidenta del Govern Balear, Rosa Estaràs, quienes inauguraron el evento entre un numeroso público, mayoritariamente femenino, que desde los primeros momentos se interesó por lo expuesto en toda su variada cantidad. Una actividad que, reseñaron, pone de relieve el apoyo social a una de las entidades con más peso específico en las Islas y que extiende su colaboración al Tercer Mundo.

G. Alomar