La primera promoción de policías turísticos ha realizado un curso de 300 horas.

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El Govern sacará a la calle en mayo a los primeros 110 policías turísticos de Balears. La Conselleria d'Interior hizo pública ayer la resolución por la cual se establecen los criterios para distribuir las plazas de la primera promoción de policías, que comenzarán a tener presencia en los municipios en los primeros diez días del mes de mayo, según anunció ayer a este periódico el conseller d'Interior, José María Rodríguez. De las 110 plazas, 78 corresponden a los municipios de Mallorca, 12 a Menorca y 20 a las Pitiüses. Aún así, el Govern sólo ha podido atender el 40 por ciento de las peticiones de policías realizada por los municipios costeros. La intención del Gabinete autonómico es ampliar durante los próximos tres años la plantilla de policías turísticos hasta llegar a los 400 agentes. «Ha sido una experiencia muy positiva y hemos cumplido nuestro programa electoral», declaró Rodríguez, quien el lunes, junto a Matas, entregará los diplomas acreditativos de la primera promoción de policías turísticos. En esta primera promoción han participado un total de 129 policías, que han tenido que realizar un curso con una duración de 300 horas. Los aspirantes, además de tener unas aptitudes físicas adecuadas, estaban obligados a conocer el catalán, castellano e inglés. Los nuevos agentes tendrán la función específica de atender las necesidades de los turistas, no irán armados y patrullarán acompañados por policías locales.

A la hora de asignar a los primeros policías turísticos, el Govern ha creído conveniente atender el 40 por ciento de las peticiones realizadas por los ayuntamientos de Menorca, Eivissa y Formentera. En el caso de Mallorca, el Ejecutivo ha cumplido el 40 por ciento de las reclamaciones de los municipios de costa y ha asignado las 10 plazas restantes entre los ayuntamientos que atienden a poblaciones de interior con más de 3.000 habitantes.

Inicialmente, la primera promoción de policías turísticos trabajará durante medio año. Sin embargo, Rodríguez prevé que de cara al próximo año los policías serán distribuidos entre los municipios a partir de marzo y trabajarán durante nueve meses.

La puesta en marcha de esta nueva dotación de policías tendrá un coste para el Govern de un millón de euros, aunque los municipios también asumirán una parte del presupuesto del nuevo servicio. Con el millón de euros, el Govern pretende subvencionar el porcentaje previsto del sueldo base, del complemento de destino, el complemento específico, el complemento de insularidad, de la Seguridad Social, el equipamiento y el uniforme. Es decir, el Ejecutivo balear pagará el 75 por ciento del salario de los nuevos agentes.