El Mercat Medieval ofreció ayer imágenes realmente singulares que trasladaron a Santanyí a otra época. Foto: TOMEU OBRADOR

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El mágico, misterioso y divertido mundo de la época medieval es este fin de semana simulado en pleno centro del pueblo de Santanyí. Para muchos, este tipo de atracción con vinculaciones comerciales y de espectáculo es «todo un acierto», si bien para muchos otros es una simple excusa y no se refleja con rigor aquella época, «siendo desvirtuada en un 80%». En todo caso, la animación y diversión es protagonista, y hoy se espera de nuevo la asistencia de centenares de vecinos y extranjeros. Hay cerca de 40 expositores, mallorquines y peninsulares. Se venden embutidos, dulces, cerámicas, bisutería, ropa, hierbas medicinales, etc.

Ayer era también el día del mercado tradicional de los sábados, por lo que algún frutero y feriante mostró su malestar por haber sido desplazados a calles adyacentes a la esplanada, cubierta de paja y adornada con banderas para la ocasión. En determinados momentos hubo colapso de gente, y muchos conductores tuvieron dificultades para poder estacionar su coche. No faltaron los personajes típicos del medievo, que involucraron al público en sus intervenciones. Hubo comediantes, músicos, malabaristas, gags, números de magia, acróbatas, bufones, etc.

A las 22.00 horas estaba previsto el espectáculo nocturno Els venedors del foc. Seguro que en la jornada de hoy volverá a ser protagonista la exhibición del arte de la cetrería, con una docena de rapaces. El concejal de Cultura de Santanyí, Cristòfol Vidal, se mostró muy satisfecho.

.T. Obrador