P.Prieto19/04/03 0:00
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PEDRO PRIETO
La Reina, los duques de Palma y dos de sus hijos estuvieron en Marineland. Fue anteayer, aprovechando el buen tiempo reinante, puesto que a principios de semana lo intentaron -sólo doña Sofía y los pequeños-, pero a causa de la lluvia tuvieron que desistir. La Reina y los duques, que llegaron a Palma el pasado miércoles -poco antes de que el presidente del Gobierno, a su regreso de Atenas, visitara a SM el Rey, en Marivent-, vestían ropa veraniega y se les veía muy distendidos y relajados. A la salida del parque -una de las visitas obligadas desde que la familia ha crecido-, el mayor de los críos echó a correr: quería ver el delfín de escayola de la fuente; si mal no recordamos, el mismo que el año pasado también llamó su atención. Poco después regresaron al palacio. ¿Iría la Reina por la noche -como hizo otros Jueves Santos pasados- a ver la procesión? (Si mal no recordamos, hace tres noches la siguió, entre el público, en la Plaça Major).

En cuanto al príncipe Felipe, ayer acudió a la entrega de premios del «Princesa Sofía», y los duques de Lugo parece que siguen en Estados Unidos aunque no se descarta que puedan aparecer cuando menos lo esperemos. Nos da la impresión de que ésta será de las pocas veces que habremos visto a la Reina, a los duques de Palma y los hijos de éstos en esta Semana Santa, a no ser que se den una vuelta entre hoy o mañana por el Club Náutico de Palma. Allí se ha desarrollado la vela ligera del «Princesa Sofía», y la próxima semana llega el plato fuerte con la entrada en liza de los cruceros, categoría en la que podrían participar el Príncipe y la infanta Cristina, cosa que ponemos en cuarentena, ya que este año, a causa de la guerra, las cosas son algo distintas a otros.

Lo que sí es probable es que el Domingo de Pascua -tal y como han hecho en los últimos seis o siete años- los miembros de la Familia Real que sigan en Palma asistan a la misa mayor en la Seu. Diremos, por último, que el pasado miércoles por la tarde SM la Reina estuvo de compras por Jaume III, algo que suele hacer durante sus vacaciones en Palma.