Celestí Alomar recibió la aprobación del sector empresarial por el stand de Ibatur en Fitur.Foto:ALFAQUI.

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Ruiz Collado. Enviado especial a Madrid.
La inauguración de la Feria Internacional de Turismo Fitur, que fue presidida por los Reyes de España, confirmó ayer el grado de confusión, incertidumbre y ambiente pesimista que hay para la próxima temporada de verano en las Islas y resto de destinos turísticos vacacionales de la cuenca del Mediterráneo ante el inminente comienzo del conflicto bélico contra Irak.

Esta situación ha provocado una paralización de ventas de reservas en la última semana en todos los mercados emisores y que los consumidores estén retrasando al máximo su decisión de viajar, según confirmaron ayer en la feria touroperadores alemanes, británicos y españoles. Sin embargo, esta situación contrasta con las ventas que hasta el inicio del año se habían llevado a cabo en Alemania y el Reino Unido, que se habían reactivado en el caso británico, pero no así en el alemán por la crisis económica que afecta a este país.

En el acto inaugural, el presidente de la Organización Mundial del Turismo (OMT), Francesco Frangiali, vislumbró un panorama más que pesimista para la industria turística. «Estamos viviendo la primera recesión turística más significativa en los últimos veinte años y hay una sensación clara de que no hay destinos turísticos seguros. Si esta situación no varía pronto, será muy duro para los países turísticos».

El comentario generalizado en la patronal hotelera Zontur, Federación Hotelera de Mallorca, Oficinas Españolas de Turismo (OET) en el extranjero, sector empresarial balear y hasta en el propio Govern, que maneja cifras positivas para este verano con más plazas de avión y prevé un 2003 superior al 2002, es que una guerra corta beneficiará a toda la industria, pero no así si se alarga en el tiempo, puesto que ello afectará a la Semana Santa y a la temporada de verano.

Todos los operadores, incluso la Administración central afirman que habrá que esperar a la feria ITB de Berlín, que tendrá lugar en la primera quincena de marzo, para despejar incógnitas. Turespaña, por su parte, indica que si hay guerra «se tendrán que paralizar las campañas de promoción, tal y como sucedió en la Guerra del Golfo. Estamos haciendo un gran esfuerzo para recuperar cuota de mercado y confiamos, en caso de que haya guerra, que el proceso sea lo más corto posible para volver a iniciar las campañas promocionales de forma intensiva.

En Alemania tenemos previsto iniciar una campaña de imagen de todos los destinos españoles, que complementará a la que se programó en prensa, pero todo ello dependerá de los acontecimientos internacionales que sucedan en las próximas semanas o meses», afirmó el director de Turespaña, German Porras. El secretario general de Turismo, Juan José Güemes, criticó ayer duramente las declaraciones del conseller de Turisme, Celestí Alomar, contra el presidente del Gobierno, José María Aznar.