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Ruiz Collado. Enviado especial a Madrid.
El conseller de Turisme, Celestí Alomar, afirmó ayer en Madrid, donde asistió a la VI Conferencia Iberoamericana de Ministros de Turismo (CIMET), que el presidente del Gobierno, José María Aznar, «está obsesionado con Balears porque las Islas representan el modelo turístico opuesto al del PP y a lo que es su concepción política. Concepción política está basada en el autoritarismo de la mayoría absoluta para imponer la autoridad frente a lo que es el pactismo y el diálogo entre fuerzas políticas».

Alomar respondía así a las declaraciones de Aznar en las jornadas turísticas organizadas por Exceltur, en las que abogó por recuperar los turistas que Balears ha perdido en los últimos tres años. «El discurso de Aznar es ilustrativo y es de agradecer porque por vez primera se ve claro lo que el PP quiere para Balears: más turistas, menos precios y ninguna inversión. Modelo que los ciudadanos de las Islas han rechazado porque conlleva masificación y por tratarse de un modelo obsoleto y absurdo que conduce a la degradación del territorio y a la pérdida de competitividad de las Islas».

Para el conseller de Turisme, «Aznar ha dejado claro cuatro meses antes de las elecciones el modelo que defiende el PP y el que defiende el Govern. Los ciudadanos tienen claro así lo que hay en las papeletas a la hora de votar y tomar su decisión. El ejecutivo autonómico ha apostado por un crecimiento moderado, la protección del medio ambiente, la implantación de una ecotasa, rechazo a la masificación y abogar por un precio justo acorde con la calidad de las infraestructuras y servicios turísticos».

Respecto al mercado alemán, que fue defendido por Aznar indicando que los turistas germanos son bienvenidos en nuestro país, el conseller apuntó: «Si el presidente del Gobierno quiere a los alemanes, lo primero que tiene que hacer, como mínimo, es ser tan sensible como el Gobierno alemán lo es con sus ciudadanos oponiéndose a la guerra contra Irak. El presidente de un país turístico se debería de oponer a la guerra de forma radical».