Es bonito llegar a las bodas de diamante de la vida en plenitud
de todo, es decir, con salud, posición y amor, además
correspondido. De ahí que Juan Ceva, que es uno de los pioneros del
turismo en las Islas, se sintiera feliz, y más estando rodeado de
muy buenos amigos.
El cumpleaños, Juan lo celebró en uno de los privados del Bahía
Mediterráneo, primero con una cena exquisita regada con ricos
vinos, seguida de un breve pero sentido parlamento en el que, entre
otras cosas, mostró su admiración por Gabriel Escarrer y reconoció
que no hubiera llegado hasta donde está de no haber sido por su
mujer. Y sin más, acto seguido se puso a cantar su canción
preferida, «Y sigo siendo el rey», una ranchera me temo que unida a
él por los siglos de los siglos, que, en ocasiones, destroza tan
magistralmente bien que suena hasta bella y afinada. Rosa, la madre
de la diputada Rosa Estarás, le replicó con otra, y Basilio
Escudero, pintor y cantante, le -nos- sorprendió con «Juanito», un
tema que le compuso ex profeso, lo que sin duda fue otra de las
grandes sorpresas que recibió en la noche, que, entre bailes,
alguna que otra canción, copas -con moderación- y chocolate con
ensaimada, fue penetrando profundamente en la madrugada.
Diremos que entre los invitados estaban el alcalde Fageda, Joan
Fageda; el empresario Gabriel Escarrer; Pere A. Serra, presidente
del Grupo Serra; la diputada Rosa Estarás; la presidenta de EMAYA,
María Crespo, y el jefe de la Policía Nacional, Pérez
Estremera.
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