Samantha Coquillat19/09/02 0:00
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El representante de padres del Consell del Patronat Municipal d'Escoles d'Infants (PMEI), Bartomeu Tugores, se queja por la mala gestión llevada a cabo por Cort, concretamente por su regidor de Educació i Joventut, Jordi Llabrés, en relación a la precaria situación de las escuelas infantiles municipales. Después de que en el pasado mes de junio, el patronato presentara un informe enumerando las deficiencias de las escoletes de Santa Catalina, Son Roca, s'Arenal y Ciutat Antiga, el Ajuntament se comprometió a mejorar sus infraestructuras.

En el caso de la escoleta de s'Arenal, que suele permanecer abierta durante el verano para aliviar los problemas de horarios de muchos padres que trabajan también durante esta época, se propuso cerrarla durante toda la temporada para realizar las pertinentes obras. Según Bartomeu Tugores, dichas obras no se han empezado hasta principios de este mes, coincidiendo con el inicio del curso de los más pequeños.

Ante esta situación, tanto el PMEI como la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) se sienten engañados por el Ajuntament por tres razones básicas. La primera de ellas es que la escuela fue cerrada en verano, privando así a muchos padres de la posibilidad de dejar a sus hijos durante sus horas laborables, para que se realizaran las obras, que no se han empezado hasta septiembre. Además estas obras de remodelación se están llevando a cabo junto a los niños. Y por último se quejan de que la gran mayoría de las deficiencias expuestas sobre todas las escuelas infantiles municipales no han sido solucionadas.

Cort dice que las obras ya están terminadas
El coordinador general de las «escoletes» municipales, Tòfol Vidal, señaló ayer, tras la reunión mantenida con representantes de los padres y de Cort, que las obras en la «escoleta» de s'Arenal empezaron en agosto y finalizaron con anterioridad al 8 de septiembre, día del inicio de las clases. «Hemos hecho un aula nueva y hemos reformado el patio», destacó, para añadir: «Sí es posible que quede por instalar una piedra de mármol sobre el cambiador, pero esto no afecta en absoluto a los niños».