La consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, pidió ayer
formalmente a Francesc Antich en nombre de Els Verds una reunión
para discutir tanto la moratoria del Ejecutivo, de la que no fueron
informados, como la reforma de las Directrices de Ordenación del
Territorio, con la que Els Verds no están de acuerdo.
De hecho, ante las reuniones que tiene previsto mantener
Francesc Antich tanto hoy con el dirigente del PP José María
González Ortea, como el día 5 con la presidenta de UM, Maria
Antònia Munar, Els Verds ha exigido al president ser tratados «como
mínimo igual que la oposición», según aseguró ayer un representante
de esta formación política.
Para Els Verds resulta preocupante que Antich negocie las
cuestiones territoriales con los dirigentes del PP cuando ni
siquiera han sido estudiadas todavía por los representantes del
Pacte. En este línea, la formación ecologista ha convocado la
semana que viene una reunión interinsular para debatir las
propuestas recogidas en la reforma de las Directrices y presentar
una alegación en toda regla en contra del proyecto. Els Verds no
está conforme con el texto presentado por la Conselleria d'Obres
Públiques ya que considera que deben modificarse muchos más
aspectos que el conseller Ferrer ni siquiera ha planteado.
Por lo que respecta al resto de negociaciones, el Govern apostó
ayer por un acuerdo inminente entre Francesc Antich y Maria Antònia
Munar para consensuar las medidas proteccionistas aprobadas a
principios de agosto por el gabinete autonómico. «Se ha hablado
demasiado a través de los medios de comunicación, pero lo cierto es
que no hay diferencias tan importantes entre el Govern y Munar; a
partir de ahora se solucionará todo», pronosticó el portavoz del
Ejecutivo, Antoni Garcías.
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