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Joan Fageda se siente orgulloso de poder celebrar una década como alcalde de Palma, porque, en su opinión, «no se puede aspirar a nada mas», aunque se resientan parcelas como la familia.

" ¿Cuál ha sido la etapa más difícil de sus diez años de alcalde?
" La primera fue durísima, de 1991 a 1995, por la grave crisis económica que obligó a reducir los presupuestos municipales. Otro recuerdo imborrable y que me pesa mucho fue la muerte de Margarita Femenías, que murió en accidente de tráfico cuando ya se habían ganado las elecciones.

"¿Recuerda Bon Sosec?
" También, también, fue una época muy dura. A nivel personal fue uno de esos momentos en que uno conoce a las personas, la política es terrible y cuando van a por tí todo vale y no tienes la misma consideración de una persona normal, a un político se le puede hacer casi de todo y no pasa nada y es muy difícil defenderse.

" ¿Pensó que era el final?
" Nunca lo llegué a pensar, porque yo estaba convencido de la injusticia que se cometía.

" ¿Lo pensó en algún otro momento de su carrera?
" Nunca he pensado en abandonar, las dificultades me resultan un acicate para seguir luchando y las injusticias me empujan a la rebeldía.

" Pocos políticos en Balears pueden presumir de la renta política que usted ha tenido.
" Es cierto y creo que lo he conseguido porque la gente confía en mi, cosa ciertamente difícil porque en los políticos no se suele confiar. Yo soy como soy, sincero.

" Y aún pide cuatro años más.
" Sí, porque esto no se acaba nunca, la política municipal es un pozo sin fondo y la ciudad no permite bajar la guardia.

"¿Quién ocupará su despacho dentro de dos años?
" Me gustaría ser yo.