Este ejercicio parte del supuesto de una situación de crisis con un eventual ataque enemigo. Foto: J.M.

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El Cap Pinar constituye el escenario del ejercicio de defensa aérea Sirio 2001 que se desarrolla entre la Península y Balears (en Cabo Pinar) desde el pasado dia 5 hasta el 10 y cuenta con 132 hombres y mujeres en Mallorca. Este ejercicio parte del supuesto de una situación de crisis con un eventual ataque enemigo y tiene por objetivo asegurar un entrenamiento de las unidades implicadas mediante la activación de un dispositivo de simulación real. Organizado, planeado y dirigido por el MACOM (Mando Aéreo de Combate del Ejército del Aire) se desarrolla en el ámbito OTAN, con medios del Ejército de Tierra, Ejército del Aire y Armada.

Sirio 2001 ha sido diseñado como el principal ejercicio para las unidades antiaéreas del Ejército de Tierra, siendo su propósito impulsar la acción conjunta en la defensa antiaérea del territorio nacional. Participan también, en el marco de la Alianza Atlántica, fuerzas de Francia, Portugal y Estados Unidos. Por primera vez en España se ha realizado un aerotransporte de una sección de asalto de misiles Hawk, desde la base aérea de Morón (Sevilla) en seis aviones Hércules del Ejército del Aire, hasta la base aérea de Son Sant Joan, para trasladarse posteriormente a la zona de despliegue en Cabo Pinar.

Según indicó el comandante Ortiz, acompañado por los distintos mandos a cargo de las operaciones, en la zona militar del Norte de Mallorca se ha establecido la unidad de defensa antiaérea ALFA, compuesta por una sección de misiles portátiles Mistral del Ramix 91 (Mallorca) de muy baja cota y 6 km. de alcance con una altitud de 18.000 metros; una sección de asalto con misiles Hawk de baja cota del RAAA 74 y con un alcance de 40 km. y altitud de 18.000 metros, de San Roque (Cádiz); un equipo de comunicaciones de la unidad de trasmisiones del MAAA (El Pardo, Madrid) y personal de transmisiones de la UT-14 (Mallorca).

La central operativa, camuflada en una zona boscosa, recibe la información de los movimientos adversarios mediante una señal lanzada al avión, que determina su procedencia. Para ello se dispone de un radar antiaéreo con un alcance en exploración calculado en 60 km. Una vez que el aparato es «iluminado», si es enemigo se realiza el disparo de los misiles, activado por control remoto. Junto al Regimiento Mixto de Artillería 91 de Balears participan fuerzas de Artillería Antiaérea y Transmisiones nacionales, cuyo conjunto comprende 2.300 personas, 260 vehículos ligeros y 350 pesados.