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Las denuncias presentadas a la Direcció General de Consum durante el año 2000 ascienden a 2.101 casos en Balears, con un incremento del 13'94 % respecto al año 1999, en el que se registraron 1.808 denuncias, según informó ayer la Conselleria de Sanitat i Consum. Entre los tipos de establecimientos más denunciados destacan, en primer lugar, las compañías aéreas, servicios de asistencia técnica, constructores, inmobiliarias, alquiler de vehículos, agencias de viajes, concesionarios y transporte marítimo.

Los sectores más denunciados son, en primer lugar, el de viajes y transportes (35'6% del total) y el de vivienda (23'42%). Del primer bloque, las denuncias se debieron, primordialmente, a cancelaciones o retrasos de vuelos, «overbooking», tarjeta ciudadana, equipajes perdidos o rotos, deficiencias del coche, cláusalas abusivas, robos y calidad del alojamiento. En el área de vivienda, los baleares han denunciado en mayor cuantía los incumplimientos de contrato y plazos, pisos con deficiencias, información fraudulenta, reparaciones o cobros excesivos y trabajos incompletos o inacabados. Un total de 1.469 denuncias procedieron de Mallorca, 250 de otras comunidades autónomas, 157 de Eivissa y Formentera, 89 de Menorca, 76 de ciudadanos de la Unión Europea y sesenta de otros países.

El Govern recaudó el año pasado 49'9 millones de pesetas en concepto de sanciones, cifra que en 1999 fue de 63'3 millones y en 1998 de 125'4, un descenso progresivo que Cabezas atribuyó a que «sube el número de expedientes pero baja la cuantía de las multas». El Govern llevó a cabo, además, 2.240 inspecciones, de las cuales 518 correspondieron a productos alimenticios, 528 a productos industriales y 1.194 a servicios.

La Consellera de Sanitat, Aina Salom, destacó ayer: «Presentamos este informe cuando hay una gran sensibilidad del consumidor sobre temas alimentarios que hay hoy en día», en referencia al mal de las vacas locas y la fiebre aftosa. El director general de Consum, Miguel Àngel Cabeza, señaló que esta preocupación no se refleja de una forma contundente en las estadísticas porque «la preocupación por el tema alimentario se ha incrementado principalmente en el año 2001, mientras que los datos presentados corresponden a un año anterior».