El pasado viernes por la noche tuvo lugar una avería eléctrica que
afectó a distintas zonas de Palma, aproximadamente entre las 21.30
horas y las 23.30 horas. Las líneas conocidas como Can Fonoll y es
Temple, de la estación de Son Molines en el Polígon de Llevant,
sufrieron la avería, la primera debido a que una torre rompió unos
conductores a causa de la fuerza del viento y la segunda debido a
la rotura de un cable subterráneo.
A partir de las 22.00 horas se iniciaron las maniobras para
aislar las líneas averiadas y para que las calles afectadas
pudiesen recibir corriente a través de otras líneas alternativas.
La avería en Can Fonoll afectó a las zonas de Foners, Manacor, es
Rafal, es Vivero y Son Fuster. Poco después de las 22.00 horas el
cincuenta por cien de los afectados ya tenían servicio. Media hora
después esta cifra llegaba hasta el ochenta y cinco por cien.
Finalmente, el servicio quedó restablecido en su totalidad a las
23.30 horas, con lo que los tres mil quinientos usuarios que viven
en esas zonas vieron cómo el suministro eléctrico llegaba a una
situación de plena normalidad.
En cuanto a la avería en es Temple, que afectó a las zonas de
Sant Francesc, Avenidas y Socors, entre otras, fueron cerca de tres
mil los usuarios afectados. Cerca de las 23.00 horas el cuarenta
por cien de ellos ya tenía suministro, que se amplió hasta el
sesenta por cien media hora después, llegando a una situación de
normalidad poco antes de la medianoche.
Según se señaló desde Gesa, la avería de Can Fonoll no
presentará ningún problema para quedar resuelta de manera
definitiva la próxima semana. En cuanto a la avería de es Temple,
al tratarse de un cable subterráneo, no podrá saberse hasta mañana
lunes el auténtico alcance de la misma.
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