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El secretario general de Asaja-Balears, Gabriel Company, garantizó ayer a los productores de carne de vacuno de las Islas un precio de 420 pesetas por kilo en canal tras los contactos que las organizaciones han estado realizando con las empresas cárnicas de las Islas. Esta iniciativa, que cuenta con el respaldo de la Conselleria d'Agricultura i Pesca, nace con la intención de garantizar unos ingresos a los ganaderos toda vez que en los mercados se ha reducido la demanda de este tipo de carne en un 70 por ciento.

La idea es desarrollar convenios, a través de Agricultura, con las empresas cárnicas isleñas para que estas adquieran «a un buen precio» los excedentes de carne y posteriormente, favorecer su venta a hoteleros y grandes cadenas de alimentación. «Las empresas cárnicas tienen cámaras frigoríficas donde pueden almacenar la carne hasta encontrar compradores y, además, en las Islas hay muchas empresas a las que les puede interesar comprar carne de primerísima calidad a un buen precio», aseguró Company.

El conseller d'Agricultura, Mateu Morro, por su parte confirmó esta noticia y remarcó que la labor de su gabinete consistirá en poner en marcha los mataderos para «hacer sacrificios de forma organizada». Muchos productores ven como se les pasa el plazo para matar terneras, (que a partir de los 12 meses ya es añojo) y, además tienen que hacer frente a los gastos de mantenimiento. Asimismo, la conselleria tiene previsto gestionar contactos entre las industrias cárnicas y entidades financieras para que las primeras puedan afrontar los gastos de la operación con créditos a «bajísimo interés».

A esta iniciativa, según Company, se podrán acoger todos los ganaderos que lo deseen, independientemente de la organización a la que pertenezcan, «porque no es el momento de hablar de organizaciones sino de sectores afectados por una situación que no han creado ellos».

En este sentido el coordinador de Unió de Pagesos, Joan Mas, aseguró que el Ejecutivo también se ha comprometido a asumir el coste del certificado veterinario que acompañará a toda la carne que se sacrifique en las Islas. Mas, que apostó por producir menos y de más calidad, reiteró que su organización pide a Madrid una ayuda directa de 40.000 pesetas por animal hasta los cuatro millones de pesetas.