El grupo del Partido Popular en el Parlament quiere presentar en el
plenario un plan para conseguir aumentar el número de viviendas sin
tener que urbanizar más el territorio. El proyecto, ideado por el
presidente del PP de Mallorca, Pere Rotger, pretende aprovechar con
fines sociales las casas que no se encuentran habitadas, lo que
beneficiaría a colectivos como el de los inmigrantes.
De esta manera Rotger sugiere que se pueden establecer unos
convenios urbanísticos entre el Govern, los ayuntamientos y los
propietarios a través de los cuales las instituciones se
encargarían de la rehabilitación de las viviendas. Como
contraprestación ambas administraciones se encargarían de alquilar
las casas por un periodo de 15 a 20 años. «De esta manera se
soluciona un problema de demanda de viviendas que hay actualmente
sin tener que construir más», ha asegurado Pere Rotger.
Por otra parte, el presidente de los populares de Mallorca
recuerda que con el nuevo plan territorial se producirá un descenso
de la cantidad de suelo urbanizable, por lo que habrá un
encarecimiento de la vivienda. Además, Rotger recuerda que si en
estos momentos el mercado inmobiliario ya es caro de por sí, hay
también una fuerte demanda que no puede asumir estos costes.
El plan diseñado por Pere Rotger supone una inversión inicial
que después del periodo de cesión de la vivienda a las
administraciones públicas será totalmente recuperada. «Además, si
un inquilino no paga se cursa un orden de desahucio y otra persona
puede habitar la casa», ha dicho Rotger. Dentro del proyecto según
su autor se puede desvincular en cierta manera a los ayuntamientos
del convenio si se crea un patronato que en nombre de la
administración local forme parte del convenio y se encargue de
llevar todos los alquileres.
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