Muchos ciudadanos no lo saben pero en las estaciones de servicio,
según una recomendación estatal aprobada hace un par de años,
aparte de no fumar, no se debe hablar con el teléfono móvil. En las
últimas semanas ha llamado la atención de algunos usuarios de las
gasolineras una señal de prohibido con un móvil en su interior y es
que parece ser, aunque no está demostrado, que las radiaciones que
emiten los teléfonos portátiles pueden provocar una situación de
peligro.
El origen de esta medida se remonta a hace varios años, cuando
una gasolinera explotó y algunos expertos aseguraron que el
desastre había sido provocado por un móvil. Fuentes de la direcció
general de Indústria aseguraron que la relación entre la explosión
y las radiaciones del móvil no están demostradas y que la
prohibición es más un mecanismo de precaución ya que las ondas
electromagnéticas pueden provocar una chispa al contacto con el
metal de los surtidores, aunque esta circunstancia aún no está
demostrada.
Por su parte Raimundo Clar, presidente de la asociación de
empresarios de estaciones de servicio de Balears, aseguró que la
mayoría de los asociados tienen alguna señalización que prohibe el
uso de teléfonos móviles en las gasolineras como medida de
precaución. «Todo lo que sea prevenir un accidente es bueno. Es por
eso que la mayoría de nuestros trabajadores avisan a los usuarios
que van a usar el móvil en las estaciones. Es igual que la
prohibición de fumar, aunque esta última precaución es más conocida
por los ciudadanos quizás porque es más obvia», señaló.
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