Son Sant Joan resolvió ayer con retrasos mínimos una jornada de gran actividad, donde se llegó a contabilizar un total de 891 movimientos de aeronaves y 130.000 pasajeros, el mayor de todo el fin de semana, según confirmó un portavoz del aeropuerto de Palma. La demora media en las llegadas fue de 16 minutos, mientras que en las salidas, se alcanzó un retraso ponderado de 24 minutos.
«El 70% de los aviones llegó a su hora y el 65% salió en el horario que estaba programado. Se trata de porcentajes muy buenos, teniendo en cuenta el elevado volumen de tráfico que se registra en esta temporada del año», dijo el portavoz del aeropuerto de Palma. Las compañías aéreas que operan en el aeropuerto de Palma tienen previsto transportar, durante este fin de semana, a 326.000 personas, cifra que supone un aumento del 2'5 por ciento respecto a las mismas fechas del año pasado. Las previsiones apuntan a que, entre los días 18 y 24 de agosto, se registrarán 4.498 vuelos en Son Sant Joan, con un cifra estimada de 578.000 pasajeros. Aunque estas cifras suponen un aumento del 1'97 por ciento en el número de movimientos respecto a las mismas fechas de 1999, el incremento en el número de pasajeros es bastante menor, ya que se prevé que haya 1.325 viajeros más, lo que supone un aumento del 0'23 por ciento a lo largo de esta semana.
El día con más tráfico de pasajeros fue ayer, sábado, ya que unas 130.000 personas utilizaron Son Sant Joan. Hoy, domingo, está previsto que circulen por las dependencias 111.000 pasajeros, frente a los 65.000 de mañana, lunes, 63.000 el martes, 69.000 el miércoles y 55.000 el jueves 26 de agosto. En temporada alta, Son Sant Joan se convierte en el principal aeropuerto turístico del Mediterráneo, y uno de los que registra un mayor tráfico de aviones y pasajeros, junto con el de Madrid-Barajas. Por ello, agosto está considerado un mes clave por los máximos responsables de las instalaciones.
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