TW
0

La jueza del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Palma se inhibió ayer de la causa que enfrenta al Ajuntament de Palma y a los empresarios de sa Llonja por la limitación del horario musical.

La magistrada celebró ayer la audiencia a la que estaban convocadas las partes, con el objetivo de determinar si levantaba o no la suspensión cautelarísima de la medida aprobada por el Consistorio, consistente en la paralización de la actividad musical de los bares a las 02.00 horas los viernes y sábados y a la 01.00 horas los demás días. Al final, la jueza decidió inhibirse en favor de una instancia superior, en este caso la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Balears.

Carmen Frigola decidió la inhibición al considerar que el Juzgado no es competente para dictar una resolución. De este modo, apoyó por completo los argumentos del letrado jefe del Consistorio, Josep Lluis Alemany, y del fiscal asignado, quienes durante la audiencia plantearon ante la magistrada que no se estaba discutiendo un caso de licencias, lo que sí sería competencia del Juzgado, sino de medidas medioambientales, con lo que se trata de una jurisdicción del TSJB. Durante la audiencia, la magistrada escuchó las versiones de las partes y la del fiscal ante la medida cautelar que el Consistorio pretende aplicar en las calles de sa Llonja enmarcadas en el perímetro de la zona acústicamente contaminada. El fiscal corroboró y apoyó en todo momento los argumentos esgrimidos por la representación legal del Consistorio.