El titular del Juzgado de Instrucción número uno de Palma, Pere
Barceló, dictó un auto el pasado viernes por el cual cerró la
instrucción del «caso Palma I» -las supuestas irregularidades
fiscales cometidas por Francisco Berga, Guillermo Coll, Francisco
Tous y Paulino Moreno en la venta a Sa Nostra de los terrenos de
Son Fuster- y lo envió a reparto a un Juzgado de lo Penal para que
fije la fecha del juicio oral.
Ésta es la segunda ocasión en que el juez Barceló decreta el
cierre de la instrucción, ya que en 1998, el Juzgado de lo Penal
devolvió el caso al considerar que la instrucción adolecía de
defectos al no contener la calificación del abogado de la sociedad
«Palma I». El fiscal y Hacienda acusan a los ex administradores de
«Palma I» de un delito fiscal por unos hechos ocurridos en 1994,
cuando a través de la sociedad Edificio Palma I vendieron a la Caja
de Ahorros de Baleares «Sa Nostra», por 747 millones de pesetas,
unos terrenos (Son Fuster) que había adquirido, junto a otros
directivos de Brokerval, por doscientos millones.
Según recoge el sumario, Berga y el resto de directivos
realizaron ambas operaciones el mismo día y ante el mismo notario,
sin declarar todas las cantidades, según distintas informaciones, a
Hacienda. El juez Barceló tuvo que recurrir a un abogado de oficio
para que defendiera a la sociedad «Palma I» en el proceso de
instrucción, ya que había quedado totalmente descapitalizada y
ninguno de sus directivos se quiso hacer cargo de los gastos de la
defensa. La abogada que en un principio debía calificar el caso
presentó su dimisión al titular del Juzgado de Instrucción número
uno de Palma, pero éste la rechazó.
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