El Insalud anunció ayer que ha puesto en marcha un plan preventivo,
como medida de precaución y con carácter urgente, para revisar y
asegurar las fachadas de siete hospitales de su red, entre ellos el
de Son Dureta, además del de Marqués de Valdecilla (Santander), que
ya está en revisión tras el accidente del pasado martes que costo
la vida a cuatro personas.
La decisión, según una nota del Insalud de Madrid, se ha
adoptado tras conocerse las conclusiones del equipo de técnicos que
ha estudiado las causas del siniestro.
Con esta medida, el Insalud quiere asegurarse del correcto
estado de las fachadas y atajar la incertidumbre derivada del
informe del equipo de técnicos sobre el incidente de Santander, que
señala que «este tipo de roturas se produce de forma súbita sin
manifestar indicios previos, tales como fisuras, grietas o
deformaciones del paramento». Y es que, se trata de hospitales de
similares características constructivas y en los que no se han
realizado intervenciones importantes de sus fachadas en los últimos
años.
No obstante, se da la circunstancia que esta revisión de las
fachadas de los pabellones ya se ha realizado en el caso de Son
Dureta, tal y como informaba este diario el pasado miércoles, a
raíz de la caída de marés de la fachada en el mes de enero. Fruto
de esta revisión Madrid se vió obligada a aprobar una partida
presupuestaria urgente de 30 millones con la que se apuntalaron las
ventanas y otros elementos arquitectónicos de la fachada. Asimismo,
se hizo un estudio arquitectónico sobre las necesidades de la
fachada y se aprobó un presupuesto de 190 millones para acometer
estas obras.
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