Amalia Estabén28/10/99 0:00
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Las flores que se ponen a la venta con motivo de la festividad de Todos los Santos apenas van a variar respecto a los precios que se ofrecen durante el resto del año, a excepción del crisantemo y de los claveles. «No van a subir ni un duro», afirma Guillermo Alemany, vicepresidente y delegado internacional de Interflora. «Desde hace tres años se van manteniendo los precios, pues subieron en este período un diez por ciento», explica.

Alemany destaca que «la fecha de Todos los Santos es una cita ineludible ya que conlleva el recuerdo de los seres queridos fallecidos y no suele faltar para ellos el detalle floral». «Los centros de flores variadas son los más solicitados "prosigue Alemany". El crisantemo va a la baja, pues la climatología ha cambiado y el de importación es carísimo. La variedad turner, conocida como 'de bola', se cotiza a 5.000 pesetas la docena. Desconozco el motivo por el cual el público ha dejado de comprarlos, pero parece ser que esta actitud se ha generalizado en todo el país. Simplemente, no gusta. Ahora existen más opciones, hay más variedad, más calidad y flores de mayor duración».

Las coronas salen poco. Tienen sus adeptos, pero éstos son contados. Más que nada las encargan las compañías de seguros y suelen costar unas 15.000 pesetas.

Entre las flores más solicitadas para ramos están los capullos de rosa, procedentes de Ecuador y Colombia, cuyo precio por unidad oscila entre las 250 y las 500 pesetas. Siguen los gladiolos, que están entre las 250 y las 300 pesetas unidad, cultivados en Mallorca y Península. Los liliums, que proceden de Andalucía y Holanda, cuestan por unidad 250 pesetas, y el lilium oriental holandés se vende a 500 pesetas unidad.