TW
0

Dos barcos de color arena ocupan en exclusiva esta semana la práctica totalidad de la segunda alineación del Dique del Oeste, rodeados por una valla metálica y guardas jurado. Es el privilegio que posee el sultán de Omán, poseedor de una inmensa fortuna cuya presencia, discreta pese a tal ostentación, despierta expectación en todos los puertos que visita. El yate personal del monarca árabe «Al Said» es uno de los mayores del mundo y en sus itinerarios siempre va acompañado del buque de apoyo «Fulk Al Salamah», que transporta ocho automóviles de gran lujo y dos helicópteros. Así asegura sus desplazamientos por tierra, mar y aire.

La lujosa embarcación fue construida en Viareggio (Italia) en 1982 por los astilleros Picchiotti y posee alojamientos dignos de una leyenda oriental. Con 3.800 toneladas de desplazamiento, mide 104 metros de eslora por 16 de manga y 5 de calado. Dos motores diesel de 8.400 h.p. le impulsan a una velocidad de 18 nudos. Su dotación suma 156 tripulantes, con 16 oficiales, y a modo de salvamento o desembarco dispone a bordo de tres grandes lanchas Puma.

El buque de apoyo «Fulk al Salamah» fue construido por el astillero alemán Bremer Vulkan en 1987 y registra 10.864 toneladas, comparable a un buque de pasaje. En su costado posee portalones laterales para el transporte de vehículos privados. Mide 136 metros de eslora por 21 de manga y en su equipamiento destacan dos helicópteros Super Puma que poseen su propio hangar frente a la cubierta de vuelo.