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Llegaron en barco al Muelle de las Golondrinas. Esperaban a los gigantes Tòfol y Francinaina el alcalde de Palma, Joan Fageda, los concejales Carme Feliu y Jose María Rodríguez, y un centenar de personas, que acudieron a la cita de bienvenida de esta réplica de aquellos gegants de la Sala que en 1936 fueron enviados a Barcelona con motivo de la Olimpiada Popular y fueron destrozados a causa de la guerra.

En los años 60 se construyeron los gigantes que presiden la entrada al Ajuntament de Palma. A partir de ahora, esta pareja tendrá compañía, ya que los nuevos gigantes también se colocarán en dependencias municipales.

En el acto de bienvenida no faltaron xeremiers, música, juegos infantiles y aplausos. Los nuevos gegants, reconstruidos en Valencia con un presupuesto de un millón de pesetas, pesan cerca de 30 kilos cada uno y tienen una altura que supera los 4 metros, medidas similares a los ejemplares construidos en 1961.

Jose María Rodríguez acudió al acto y animó a los vecinos de Palma «a que construyan sus propios gigantes. Son un símbolo de fiesta, porque alrededor de sus figuras se encuentran los xeremiers, tamborers, etc», afirma el concejal. Una vez desembarcados, Tòfol y Francinaina posaron con los gigantes que reciben a los visitantes en Cort.