Numeroso público se congregó en el puerto de Palma para presenciar la botadura del «Sunbird». El día, soleado y caluroso, acompañó al acto. Foto: ALEJANDRO SEPÚLVEDA.

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El puerto de Palma se vistió de gala ayer para celebrar la ceremonia de bautizo del nuevo crucero de Sun Cruises/Airtours Sunbird. David Crossland, presidente del grupo, adelantó que éste será «el año de mayor ocupación turística en Balears», ante el volumen de reservas existente. Durante esta temporada el touroperador británico prevé traer a Mallorca 104.000 cruceristas en los tres buques que han fijado su base en Palma, a precios competitivos.

El presidente de Airtours destacó la creciente demanda en términos cualitativos, que ha permitido gestionar la ocupación de unidades con un alto nivel en el mercado y estancias de una o dos semanas en hoteles dentro del segmento de las tres y cuatro estrellas. El Sunbird, cuarta unidad de la flota, se enmarca en la tendencia a potenciar el sector turístico en Mallorca, «donde todos somos socios en esta maravillosa industria», recalcó.

La fórmula para garantizar el éxito de esta empresa, que posee un valor de mercado cifrado en dos billones de libras, se fundamenta, según Hugh Collinson, presidente de Sun Cruises, en dar mayores oportunidades a los clientes, mejorar el producto con más escalas, buques y tecnología y obtener beneficios que revierten en los empleados de Airtours, 20.000 en total actualmente frente a los dos de hace 28 años.

El presidente de la Autoritat Portuària, Lluís Ramis de Ayreflor, indicó que «el puerto de Palma es el Miami de Europa» y anunció que esta temporada Balears liderará el sector crucerístico del Mediterráneo con 750 escalas, de las cuales 480 corresponden a Palma. La recepción comenzó al mediodía y asistió el president de la CA, Jaume Matas.