Cada día pasan por el comedor de transeúntes 90 personas. Foto: JAUME ROSSELLÓ.

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El problema de la alimentación del de los inmigrantes procedentes de países subsaharianos que han llegado a Mallorca, en importante número, para trabajar en las obras del Pla Mirall se añade ahora al de las necesidades de vivienda, todavía no se ha resuelto.

El sistema arbitrado por la Direcció General d'Acció Social para aprovisionar de alimentos a los inmigrantes que acuden al comedor de transeúntes, dependiente del Govern balear, no parece convencer a algunas personas del ámbito de los servicios sociales. Cada sábado y domingo, el comedor de transeúntes distribuye cajas de comida entre los inmigrantes que no tienen recursos económicos porque no trabajan o que, aunque han encontrado un empleo, no han cobrado su primer sueldo para que puedan llevarse la comida a los puntos de trabajo, ya que no a todos les es posible acudir al comedor a diario.

Estos días se ha especulado con que el comedor había suprimido el servicio de cajas de comida debido a su carestía, a lo que el director general d'Acció Social, Miguel Àngel Martín Soledad, ha salido al paso diciendo que «en ningún caso se han dejado de repartir cajas cada fin de semana y que lo que ocurre es que se ha planteado modificar la dieta de las personas a las que van destinadas estas cajas para que sea más variada y sana e, incluso, puedan comer caliente cada día».

Según Martín Soledad, el comedor de transeúntes propuso a la Direcció General d'Acció Social cambiar la dieta de las cajas de comida, ya que éstas contienen sólo productos no pedecederos, como comida enlatada y embutidos, y sus destinatarios comen lo mismo durante los cinco días laborables.

Acció Social planteaba suministrar la comida cocinada cada día a los tres centros que acogen inmigrantes "Hospital de Nit, Can Pere Antoni y Ca l'Ardiaca" para que éstos la distribuyan, con el fin de mejorar el trato a los inmigrantes, «puesto que los centros disponen de neveras para guardarla y se les proporciona una alimentación más adecuada», señaló Miguel Angel Martín. Según el responsable de este departamento, Acció Social apoyaría la tarea del reparto de comida con voluntarios.