Palma dispone desde ayer de siete nuevos taxis adaptados al
transporte de minusválidos, gracias al acuerdo suscrito entre el
Ajuntament palmesano, el Imserso y la Fundación ONCE, con lo que la
ciudad cuenta ya con once vehículos de este tipo.
En virtud de este acuerdo se han concedido dos millones de
subvención a cada uno de los siete titulares de la licencia para
que adaptaran sus automóviles, que cuestan cuatro millones y medio
de pesetas. Los nuevos vehículos adaptados ya tenían licencia del
Consistorio, aunque habían perdido, por diversas razones, el
permiso de la Conselleria de Transporte para los servicios
interurbanos. A partir de ahora también disponen de esta segunda
licencia, que estuvo condicionada a que adaptaran el coche.
El secretario general de la Fundación ONCE, Miguel Pereira,
explicó que en todo el país existen ya 500 vehículos de este tipo,
«aunque lo ideal sería que todos los taxis fueran accesibles a
minusválidos», dijo y adelantó que, de hecho, «ya se trabaja en un
prototipo que cumpla este requisito». Por último, Joan Fageda
confirmó que Palma contará pronto con un sistema de bono-taxi para
personas discapacitadas.
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