El presidente de los constructores de Baleares advirtió ayer que
«si no se respetan» los plazos fijados por las Directrices de
Ordenación del Territorio (DOT) se podría producir un
encarecimiento tal del suelo que impediría «a muchas familias» de
Baleares la compra de viviendas.
Manuel Gómez advirtió que en la Comunitat residen 22.000
familias cuyo poder adquisitivo no les permite adquirir viviendas
por encima de los 13 millones de pesetas y que, si no se respetan
estos requisitos marcados en las directrices, estas personas
deberían vivir en permanente alquiler.
El representante de los constructores de Baleares participó y en
el III Encuentro Empresarial de la Economía Balear, organizado en
Palma por el diario Cinco Días y Arthur Andersen, en colaboración
con el Banco de Crédito Balear. Durante su intervención, Gómez
sostuvo que los ayuntamientos deben adaptarse cuanto antes a los
planes territoriales parciales y éstos han de estar aprobados en
tres o cuatro años como mucho. Además, «se requiere» que el Govern
balear adopte una política balear de vivienda «valiente y decidida
con el fin de permitir el acceso a las mismas a familias que
necesitan ayuda».
Por otra parte, el Boletín Oficial de la Comunitat Autònoma
publicó el sábado las Directrices de Ordenación del Territorio, por
lo que ya están en vigor.
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