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Como publicó Ultima Hora el alcalde de Palma aceptó la propuesta del Consejo de Administración de la Unión de Usuarios de ampliar la superficie del mercado de forma que todos los puestos se ubiquen en la planta baja. El alcalde anunció que encargará un estudio a los servicios técnicos municipales para ver si es posible plantear la ampliación, que significaría ocupar 1.000 metros cuadrados de la superficie de la plaza pública. El presidente del Consejo de Administración de Usuarios y el alcalde explicaron que esta solución parece la más viable para acabar con el conflicto.

Inmediatamente, la Associació per a la Revitalització dels Centres Antics (ARCA), hizo saber a Fageda su opinión en contra del aumento de volumen del edificio, entre otras razones «porque se trata de un edificio protegido, con ficha en el catálogo oficial». Un portavoz de ARCA dijo ayer a Ultima Hora que «en principio, y así se lo hicimos saber al alcalde, nuestra asociación está a favor de los minoristas del pescado en su reivindicación de mantener sus puestos de venta en la planta baja, para que no se pierda este enclave tan ciudadano y tradicional. Después se ha anunciado la propuesta de ampliar el edificio, y en esto no estamos de acuerdo y por eso pedimos al Ajuntament que sea consecuente, ya que no se puede realizar un catálogo de edificios a proteger y después se contradiga proponiendo la modificación de uno».