La organización ecologista Greenpeace propondrá hoy a los
responsables del Consell un plan de tratamiento de residuos cuyo
fin último es conseguir el cierre de la planta incineradora a
través de la progresiva implantación del reciclaje y el compostaje.
Los ecologistas van a esta reunión con la intención de colaborar
con el Consell en materia de residuos si ven buena disposición por
parte de sus responsables políticos.
En caso contrario, Greenpeace advierte en un comunicado que
intensificará la campaña en contra de la incineración. «En caso de
que el Consell mantenga la actitud de oídos sordos a las propuestas
que le ha caracterizado tanto en la época en que era gobernado por
el PP como ahora, en manos del Pacte de Progrés, Greenpeace anuncia
que intensificará su campaña en contra de la incineradora para que
sea la presión social la que convenza a las instituciones de la
necesidad de cambiar de rumbo en este tema», advierte en el
comunicado.
En la nota, señalan además que expertos en residuos de
Greenpeace están trabajando en la puesta a punto de una propuesta
detallada que presentarán al Consell, «que facilitaría un tránsito
decidido desde la caótica gestión actual de los residuos a un
programa que respete el medio ambiente y la salud pública; cree
puestos de trabajo, sea económicamente viable y resulte sostenible
indefinidamente».
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