Imagen de archivo de Umberto Bossi, líder de la Liga Norte, formación muy crítica con la corrupción. | Efe

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La policía italiana registró ayer la sede de la Liga Norte, exaliada gubernamental de Silvio Berlusconi, en el marco de las investigaciones por supuesta apropiación indebida y estafa agravada en perjuicio del Estado por parte del tesorero del partido, Francesco Belsito.

En la orden de registro de las oficinas de la Liga en Milán, se lee que Belsito desvió supuestamente fondos públicos «para sufragar los costes de la familia» del líder de la formación, Umberto Bossi.

Según explicó el fiscal de Milán, Edmondo Bruti Liberati, las investigaciones a Belsito y a otras dos personas apuntan a un supuesto delito de apropiación indebida por dinero que sustrajo a la Liga Norte.

Belsito está siendo investigado, además, por supuesta estafa agravada en perjuicio del Estado por fondos percibidos en concepto de financiación a los partidos en la campaña electoral.

Pesquisas

Las investigaciones nacieron a partir de una serie de movimientos financieros en el extranjero, que desembocaron en inversiones sospechosas de fondos electorales de la Liga en Tanzania y Chipre.

Asimismo, se sospecha que los actos ilícitos de Belsito tuvieron lugar incluso cuando ocupaba el cargo de subsecretario de la Simplificación Normativa, durante el último Gobierno de Berlusconi.

Las pesquisas han sido coordinadas por la Fiscalía de Milán, junto con la de Nápoles y la de Reggio Calabria.

El exministro del Interior Roberto Maroni, uno de los miembros más destacados de la Liga, manifestó que la formación debe «reaccionar en seguida, demostrando que no tiene nada que esconder».