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AGENCIAS-WASHINGTON

El presidente de EEUU, Barack Obama, anunció ayer el envío de más de 30.000 soldados adicionales a Afganistán que quedarán desplegados a lo largo de seis meses, un plazo sorprendentemente rápido.

Obama explicó su esperada nueva estrategia para la guerra en la República islámica en un discurso en la prestigiosa academia militar de West Point.

En declaraciones a varias cadenas de televisión, el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, afirmó que el presidente anunciaría un «envío acelerado» de refuerzos, que irá «mucho más rápido que lo previsto en el plan original».

La meta, indicó Gibbs, es adiestrar a las fuerzas afganas lo más rápidamente posible para que puedan hacerse cargo de la seguridad de su país, de modo que las tropas estadounidenses puedan ir saliendo gradualmente. «Nuestro compromiso no es de duración indefinida», explicó.

Los planes de Obama incluyen un calendario a grandes trazos para la salida de las tropas estadounidenses y la cesión del control a las fuerzas afganas. Su objetivo es concluir el conflicto en tres años y retirar a la mayoría del personal de EEUU en ese tiempo.

Los soldados adicionales comenzarán a desplegarse en el sur y el este de Afganistán, donde la insurgencia talibán se ha mostrado más activa hasta el momento. La idea es minar la capacidad militar de los talibán de modo que las fuerzas afganas puedan hacerles frente por sí solas, explicaron las fuentes.

Los 30.000 soldados se sumarán a los 68.000 militares estadounidenses que ya se encuentran en Afganistán. En total, la fuerza internacional allí desplegada cuenta con cerca de 100.000 efectivos.

Cuando Obama llegó a la Casa Blanca el pasado enero, el contingente estadounidense estaba compuesto por cerca de 35.000 soldados.

El nuevo contingente se desplegará en un plazo sorprendentemente rápido, apenas seis meses, en una operación que se completará para el próximo verano.

Hasta ahora, los analistas calculaban que para un refuerzo de esa magnitud sería necesario cerca de un año, debido a la dureza del clima afgano y a la necesidad de esperar al regreso de las tropas ahora mismo destacadas en Irak.

Obama dio órdenes a los mandos militares para que aceleren el despliegue de los refuerzos, de modo que esté completado para el verano, indicaron los altos funcionarios, que no explicaron cómo se logrará.