Schroeder juega con un balón de fútbol en presencia de Aznar tras finalizar la cumbre.

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EFE - ESTOCOLMO La Unión Europea (UE) cerró ayer su cumbre económica de primavera sin alcanzar acuerdos sobre algunas de las principales reformas sobre la mesa, aunque sus dirigentes aseguraron que los progresos superaron las expectativas pesimistas de la víspera. La oposición de Francia impidió fijar una fecha para la plena liberalización de los mercados de energía, el contencioso de Gibraltar aplazó el acuerdo para un «cielo único», y una disputa lingüística frustró el acuerdo sobre la patente comunitaria.

Sin embargo, el anfitrión de la cumbre, el primer ministro sueco, Goran Persson, aseguró que los resultados de la reunión superaron sus expectativas. Destacó el acuerdo sobre el informe Lamfalussy para la integración de los mercados financieros europeos. El primer ministro francés, Lionel Jospin, dijo que Francia no acepta la liberalización de los mercados de energía «como un fin en sí mismo» y que otros objetivos son garantizar la eficacia y la continuidad del servicio público.

En este sentido, el presidente del Gobierno español, José María Aznar, advirtió que la UE debe establecer unas cláusulas mínimas que garanticen el funcionamiento del mercado único frente a los problemas derivados de la pervivencia, en algunos países, de sectores «cerrados» sujetos a monopolios públicos. Al respecto, consideró «absurdo» que una empresa pública de un Estado miembro se aproveche de la liberalización de mercados aplicada en otro país de la UE y recalcó que, mientras estas compañías no se privaticen, que sería «lo lógico», la Comisión Europea debe velar por el cumplimiento de las reglas de competencia y evitar «posiciones abusivas» de entidades que actúan en monopolio.

Sobre el espacio único, el presidente español afirmó que confía en acordar con el Reino Unido, tras las elecciones británicas y antes de la cumbre de Gotemburgo, una fórmula sobre el espacio aéreo europeo que respete las necesarias salvaguardas sobre el aeropuerto de Gibraltar. Aznar se mostró satisfecho de los «importantes puentes» tendidos en Estocolmo hacia el Consejo de Barcelona y se felicitó de que las conclusiones de la cumbre hayan recogido los «elementos básicos» de su propuesta sobre reforma de los sistemas de protección social.