El apresurado regreso a Israel del ministro de Interior y
Exteriores israelí, Shlomo Ben Ami, desataba ayer los rumores de un
inminente acuerdo en el conflicto palestino. Algunos signos
externos, así como una importante reunión en Gaza que se inició
anoche apuntarían en esa dirección. Pero, el carácter, el alcance e
incluso la posibilidad de tal acuerdo eran desconocidos.
Aunque representantes de ambas partes quisieron mantener la
reunión bajo un cierto secretismo, los medios de comunicación y
observadores han dicho que, al parecer, ésta tendrá lugar en el
paso fronterizo de Erez, que separa Israel de la franja de Gaza, y
que comenzó anoche. En el encuentro, además, los representantes del
Gobierno israelí y del Gabinete palestino continuarán el diálogo
sobre asuntos de seguridad reiniciado hace algunos días en El
Cairo, con la mediación de EE UU y Egipto.
En la reunión de anoche tenían previsto participar los ministros
israelíes de Asuntos Exteriores, Shlomo Ben Ami, y Transporte y
Turismo, Amnon Lipkin-Shájak, así como los palestinos de
Información y Cultura, Yaser Abed Rabbo, y Gobernación Local, Saeb
Erekat.
Con ese objetivo, Ben Ami suspendió todas las reuniones que
tenía previsto celebrar esta tarde en París para regresar de forma
inesperada a Israel, los que sus allegados achacaron a
«acontecimientos dramáticos positivos». También existía la
posibilidad, a la que se refirió la prensa, pero que no fue
confirmada, de que tras la citada reunión, el presidente de la
Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yaser Arafat, celebre otra en
las próximas horas con el ministro israelí de Cooperación Regional,
el veterano dirigente laborista Simón Peres.
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