Més per Mallorca reunió este lunes por la tarde su ejecutiva en la sede de la calle Isidoro Antillón. | Jaume Morey

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Vienen tiempos de pactos y Més ya ha empezado a preparar su estrategia de negociación en vistas a la formación de los gobiernos de la Comunitat Autónoma, el Consell de Mallorca y en el Ajuntament de Palma.

El día después de unos comicios en que han perdido peso en relación al PSIB, los 'ecosoberanistas' ya comenzaron a hablar en la reunión que celebró este lunes su ejecutiva de crear un equipo que negociará específicamente los términos del futuro pacto en que los socialistas tendrán más peso respecto a 2015 y ellos menos. Habrá que ver también si finalmente Podemos, que esta última legislatura ha estado ausente, entra ahora en el Govern y en que condiciones lo hace. Los partidos no se han citado ni han hablado de ello, pero saben que próximamente tendrán que abordarlo.

Sin embargo, los dirigentes de Més centraron el encuentro de este lunes en analizar los resultados. Fue una primera aproximación. Celebran que el Archipiélago estará gobernado por segunda vez consecutiva por un ejecutivo de izquierdas, pero lamentan haber perdido votos en relación a 2015. También les pesa que en algunas instituciones –incluidos consistorios– el PSIB haya cosechado los éxitos de una faena en qué se habían implicado mucho.

Los ecosoberanistas también analizaron la campaña electoral, de la que coincidieron en estar muy satisfechos.

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En la ejecutiva no se habló de cargos en los futuros ejecutivos, sino que se dejó para más adelante, pero informalmente algunos dirigentes ya han lanzado algunas propuestas.

Entienden que el PSOE ha salido muy reforzado y, así como en 2015 pudieron hacerse con la presidencia del Consell o alcanzaron un acuerdo para compartir la alcaldía de Palma, ahora les resultará muy difícil hacerse con un cargo de tanta relevancia como los mencionados.

Primeras propuestas

Informalmente, algunos dirigentes consideran que Fina Santiago debe estar en el Govern y ocupar un cargo de consellera. También se ha planteado la posibilidad de pedir la presidencia del Parlament, e incluso se ha sopesado que pueda ser para Miquel Ensenyat.

Algunos de los dirigentes consultados insistieron en que la pérdida de votos en relación a las elecciones de 2015 no les debe impedir celebrar que el Archipiélago tendrá nuevamente un gobierno de izquierdas, el segundo consecutivo, un «hito histórico» en el que «Més per Mallorca también ha contribuido de manera activa».