El estand de Eivissa en Fitur estuvo muy concurrido todos los días en los que duró la feria.

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La isla de Eivissa acudió a Fitur 2024 con el firme objetivo de consolidar su imagen de líder turístico nacional e internacional, además de buscar promocionarse como una isla que se puede visitar durante todo el año, ya que su oferta va más allá del sol y playa. «El objetivo no es batir el récord en número de visitantes sino que aumenten su estancia y gasto, además de respetar una tierra que tiene mucho que ofrecer a todo aquel que nos escoja como destino para pasar sus vacaciones», explica Vicent Marí, presidente del Consell d’Eivissa. Para ello, la mayor de las Pitiusas apostó en su conjunto por la promoción de los grandes eventos deportivos de la isla (hay ocho pruebas deportivas declaradas de interés turístico), la gastronomía, ofreciendo degustaciones en el estand propio de Eivissa así como charlas sobre el producto local, el turismo de incentivos y MICE y el Ibiza Pride, que este año celebra sus primera década de vida.

Uno de los principales anuncios de Eivissa en Fitur 2024 ha sido la puesta en marcha del Sistema de Inteligencia Turística de la isla de Ibiza (SITE), un observatorio propio de flujos y tendencias turísticas que incluirá la compra de ‘big data’ que pueda servir como base estadística para empezar a desarrollar «toda una serie de información que debe de ayudar a administraciones y empresas en la toma de decisiones». Estas decisiones, según expresa, irán «más allá de solo las políticas de promoción turística» atendiendo que «conocer los flujos, comportamientos y gustos de quien nos visita nos permitan tomar decisiones tan transversales como las referidas a la gestión de residuos, urbanística, de infraestructuras o de ordenación, por ejemplo», según precisa. «Será una revolución para todo el sector a la hora de determinar la manera de definir las actuaciones y políticas públicas de la isla de Eivissa, concluye el presidente Vicent Marí. En el plano más municipal, cada pueblo optó por incidir más en algún aspecto promocional. Por ejemplo, Santa Eulària des Riu recalcó su imagen más familiar, mientras que Sant Antoni de Portmany se vendió como un destino para ser visitado los 365 días del año y Sant Josep de sa Talaia como el lugar idóneo para disfrutar de la música en directo. El municipio de Eivissa, por su parte, incidió en su aspecto más cultural.