Instalaciones de Isla Blanca Crossfit, en Eivissa. | DE

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Luchar contra la rutina en el deporte nunca fue tan exigente y divertido como lo es desde la llegada del crossfit a Eivissa. Esta disciplina importada hace un lustro desde EEUU se define como un “movimiento funcional con constante variación y ejecutado a alta intensidad”. En la práctica, se trata de circuitos que combinan ejercicios aeróbicos (correr, saltos de comba, remo) con elementos propios de la gimnasia (dominadas, fondos, abdominales), movimientos de halterofilia (snatch, clean, peso muerto, sentadilla) y otros más rudimentarios como escalar una cuerda, caminar haciendo el pino o remolcar neumáticos de camión.

En Eivissa, los pioneros de este tipo de entrenamientos de alta intensidad fueron los franceses Clarisse y Nicolás Rapeso. Este matrimonio de emprendedores comenzó su andadura en la isla en 2014 con un humilde local de unos 80 metros cuadrados y apenas una docena de clientes. Arrancar fue difícil, pero más lo fue mantenerse y ampliar un negocio novedoso en la isla y frágil ante franquicias consagradas en el sector del fitness y la musculación en Eivissa. Sin embargo, el boca a boca, la implantación del CrossFit a nivel estatal y, sobre todo, la profesionalidad y la experiencia de Nico Rapeso dieron a Isla Blanca CrossFit el impulso definitivo para consolidar su marca en la isla. De hecho, Isla Blanca es el primer CrossFit Box (gimnasio) afincado en Eivissa.
La pasión y el compromiso de esta pareja de atletas convenció a un inversor local para ampliar el negocio instalando la nueva base de operaciones de Isla Blanca CrossFit en una coqueta nave a las afueras de Vila, en el barrio de Cas Serres.

Los clientes no pagan por alquilar unas máquinas, quienes acuden a estas innovadoras instalaciones situadas en la calle Músic Rafel Zornoza reciben entrenamientos dirigidos por coaches certificados que ponen especial énfasis en la técnica correcta y segura para sus clientes. Se trata de un equipo de profesionales comprometidos con los objetivos de desarrollo físico y personal de cada uno de sus atletas y realizan para ellos sesiones divertidas, exigentes y siempre supervisadas.

EN LAS MEJORES MANOS. Nico Rapeso comenzó su idilio con el crossfit en 2010. “Estaba buscando siempre un buen entrenamiento para mí y mis clientes. Los entrenamientos que existían no eran completos del todo como yo quería. Un día vi un vídeo de crossfit y allí empecé. Me quedé pasmado al ver todos los tipos de ejercicios y el trabajo completo. Entendí que era exactamente lo que estaba buscando”, recuerda este atleta de 36 años, que admite que el objetivo de esta actividad no es otro que “estar en forma”. Superar límites y sufrir en equipo son dos de los principales desafíos que se marcan diariamente los alumnos de Isla Blanca, que son ya parte de la familia de Isla Blanca.

Nico Rapeso es, además, el mejor coach posible para esta comunidad de atletas. El deportista francés comenzó con el Nivel 1 de crossfit, el básico, y pronto se tituló en el Nivel 2, más enfocado al ‘coaching’ y la programación del entrenamiento. Después se sacó el título de CrossFit Kids, y otras licencias como el CrossFit Gymnastic Trainer Certificate, el CrossFit Weighlifting Certificate y el CrossFit Competitor. Rapeso prosigue con su formación y su siguiente objetivo pasa por alcanzar el Nivel 3.

CROSSFIT KIDS. Como novedad, Isla Blanca CrossFit presenta su novedoso programa para niños, Crossfit Kids, pensado para desarrollar la preparación física general de los más pequeños. El objetivo es evitar los problemas y enfermedades (obesidad, hipertensión, problemas posturales) asociados al sedentarismo que padecen muchos niños en la actualidad.

Para los impulsores de Isla Blanca CrossFit, el deporte en general resulta muy beneficioso para reforzar la confianza y la autoestima de los niños, en especial de aquellos más tímidos e introvertidos. La consecución de metas y el desarrollo de nuevas habilidades unido al refuerzo positivo de los entrenadores y el formar parte de una comunidad deportiva activa, es muy beneficioso para ellos.

Según explica Rapeso, también refuerza la disciplina. Al tratarse de un tipo de entrenamiento en el que el entrenador está continuamente supervisando a los alumnos, estos van adquiriendo poco a poco una disciplina deportiva que también se transfiere positivamente a la vida en el exterior.

Además, recuerdan, una de las bases del crossfit es el respeto. La comunidad de un BOX no se mantendría saludable si se vulnera este principio básico. Este respecto es hacia otros compañeros y también hacia el propio entrenador. Los niños saben que deben hacer caso a las indicaciones de los coaches y estos exigirán su concentración y dedicación durante el entrenamiento.

Pero los beneficios del crossfit para los niños no se traducen en físicos únicamente. Como en otros deportes, en el crossfit se desarrollan capacidades como el liderazgo, trabajo en equipo, capacidad de escuchar, superar distintos retos, etc.

En Isla Blanca Crossfit, por medio de múltiples estudios, han comprobado que esta actividad también mejora el rendimiento académico en edades escolares. Y, por supuesto, refuerza el compañerismo. La cultura del crossfit también se extiende para los entrenamientos en los niños. Un WOD no acaba hasta que acaba el último de los compañeros, así que ningún niño se queda atrás. Los niños aprenden a animar a sus compañeros para ayudar a terminar los WOD. Esta camaradería y sentimiento de comunidad es muy beneficiosa para la formación de una actitud correcta en los niños y niñas.

EL ABC DEL CROSSFIT. En Isla Blanca se trata de seguir el estilo de vida recomendado por el fundador de esta nueva fórmula de entrenamientos, Greg Glassman: “Come proteínas, vegetales, semillas, nueces, algo de fruta y nada de azúcar. Ingiere cantidades para mantener el ejercicio y no la grasa corporal. Practica los levantamientos principales: peso muerto, clean, sentadilla, press y arrancada. Igualmente lo básico de la gimnasia, dominadas, fondos, trepar la cuerda, lagartijas, abdominales, invertidas, piruetas y volteretas. Anda en bicicleta, corre, nada, rema, fuerte y rápido. Cinco o seis días a la semana, mezcla estos elementos en la mayor cantidad de combinaciones y patrones posibles. La rutina es el enemigo. Mantén los entrenamientos cortos e intensos. Regularmente aprende y juega deportes nuevos”. Como auténticos espartanos, cada vez son más los fieles a este estilo de vida saludable gracias a Isla Blanca CrossFit.