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No se puede jugar así con el tiempo de tus seguidores. Eso es lo que piensan dos fans de Madonna, quienes, hartos de la impuntualidad de la Reina del Pop a la hora de comenzar sus conciertos, han decidido interponer una demanda colectiva contra la Ambición Rubia. ¿El motivo? La publicidad engañosa.

Michael Fellows y Jonathan Hadden, dos fans de la artista de Vogue, La isla bonita o Like a Virgin, son quienes están liderando la acusación, que además de a Madonna tiene como demandado también a la organizadora de conciertos Live Nation, tal y como ha podido saber el portal de noticias TMZ.

En su alegación, Fellows y Hadden explican los grandes perjuicios que suponen que un espectáculo que estaba programado para dar comienzo a las 20.30 horas no acabe dando el pistoletazo de salida hasta las 22.30 horas, si bien no especifican a qué perjuicios se refieren —por ejemplo, tiempo de sueño, vuelta al hogar o posibles trabajos al día siguiente, etcétera—.

Según la demanda, dichos inicios tardíos constituyen un "ejercicio sin motivo alguno de publicidad engañosa, de tergiversación negligente y prácticas comerciales desleales y falsas" con el consumidor. Asimismo, apuntan que se refieren a las tres noches en que Madonna llegó tarde al Barclays Center de Nueva York el pasado diciembre —agregando sin embargo que Madonna tiene un largo historial documentado de no iniciar a tiempo sus shows—.

Aunque los demandantes reconocen que Madonna tuvo un importante problema de salud meses antes, el cual había provocado de hecho que el concierto se pospusiera de julio al último mes del año, no creen que sea excusa suficiente para comenzar los tres espectáculos concertados con dos horas de retraso con respecto a lo anunciado.

Entre otras razones, explican, por lo caros que son precisamente dichas entradas, cuyo precio, detallan, oscilaba entre los 155,90 y los 292,50 dólares (de 143,25 a 268,8 euros), que es lo que pagaron cada uno de ellos. Según especifican, fue dinero tirado a la basura porque no pudieron disfrutar bien de los espectáculos habida cuenta de lo tarde que comenzaron.

Este disgusto de los fans, que ya expresaron muchos en redes sociales justo cuando acabaron los shows de diciembre, no es sin embargo nuevo, dado que la Reina del Pop ya ha sido demandada en más ocasiones por comenzar tarde sus propios conciertos: las más recientes, en 2019 y 2020.