La cinta de Martos está producido por la Escola Superior de Cinema i Audiovisuals de Catalunya (ESCAC) y ya pudo verse en el Festival de Cannes, donde participó como parte de la Cinef, dedicado a los proyectos de estudiantes.
En Valladolid, sin embargo, competía en la Noche del Corto Español como un título más, sin tener en cuenta su condición de hecho por estudiantes, y fue admitido junto a otros cinco proyectos más.
A su vez, en la misma semana que pudo verse en la Seminci, el cortometraje también se dejó ver en otro certamen, esta vez en Londres, haciendo que el equipo tuviera que repartirse entre los dos eventos.
En la Seminci, como decimos, Trenc d’alba ha logrado esta mención especial en la categoría Espiga Verde, que está destinado a los filmes que tengan un valor ecologista y en defensa del medioambiente. Ahora, la siguiente meta puesta por el equipo del cortometraje son los Goya, a los cuales son candidatos, y que sería el broche a un recorrido más que exitoso de este proyecto con sabor balear.
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