Francina Armengol recorre algunas de las propuestas de la Nit de l’Art, en la galería de Horrach. | Clara Ferrer | PALMA

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El mundo de la cultura, aquel en el que Horrach se sentía más completo, reaccionó con dolor y sorpresa a la noticia. El presidente de la Fundació d’Amics del Patrimonio, Joan Guaita, describió a Horrach como «alguien brillante y fantástico», aunque el adjetivo que mejor le definía era el de «curioso del arte». Según Guaita, Horrach era una persona «que sabía estar con el artista y tenía un gran poder de convocatoria» y que «si prometía algo, lo cumplía». Esta es la razón que le llevó a trabajar con grandes artistas. Guaita, de hecho, recordó que Horrach y él se conocieron porque «de joven venía a mi galería a preguntarme cosas porque su padre tenía una galería de tipo más clásico, y él quería ser moderno, y lo consiguió». A su vez, Guaita destaca que cuando fue presidente de los galeristas, «Horrach era mi secretario, por lo que tuvimos mucho trato cercano y era alguien muy serio. Nos admirábamos desde hace más de 30 años», rememoró.

Jaume Ripoll, por su parte, fundador de Filmin y director del festival Atlàntida Mallorca Film Fest, habla de Horrach como «el amigo perfecto» y comenta que «Mallorca ha perdido a uno de sus faros, un referente que amaba Mallorca y que ha hecho mejor la vida de los que tuvimos la fortuna de estar con él». Ripoll, que tiene en sus pensamientos a la familia de Horrach, cuenta que le conoció gracias a «Sebastià Munar y así pude disfrutar de su amistad en los últimos tres años». Para Ripoll, Horrach era «un confidente discreto, un anfitrión generoso, un conversador rico en ingenio y anécdotas». «De abrazo cálido y sonrisa a media asta», explica Ripoll que recibe la noticia «con pesar infinito en una casa que él inauguró hace menos de un año y en la que cuelga uno de sus regalos, un cuadro de dos artistas que descubrió él, Muntean y Rosenblum, titulado, La forma en la que deberían ser las cosas», lo que le hace pensar que «las cosas no deberían ser así» , pero que «habiendo llegado la muerte no puedo más que rendir un homenaje a quien tanto hizo por la cultura, el Atlàntida y por nosotros», detalla.

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La sociedad balear está de luto por esta triste pérdida y en el panorama político no han faltado los mensajes sobre el fallecimiento. la presidenta del Govern, Francina Armengol, y la presidenta del Consell de Mallorca, Catalina Cladera, han sido de las primeras en lamentar la muerte del mallorquín. En un mensaje en Twitter, la líder del Ejecutivo autonómico ha expresado su tristeza por la muerte del galerista y ha trasladado su pésame a su familia y el mundo de la cultural Armengol ha recordado que hace poco él mismo le enseñaba su última exposición «con la alegría que el arte, su gran pasión, siempre despertaba en él».

También en Twitter, la presidenta insular se ha mostrado «consternada por la triste noticia». «Difícil encontrar palabras para expresar lo mal que me sabe», ha afirmado. A su vez, el alcalde de Palma, José Hila ha lamentado el fallecimiento del galerista. A estos mensajes se han sumado Llorenç Galmés, presidente del PP de Mallorca y portavoz en el Consell de Mallorca, y Patricia Guasp, coordinadora de Ciudadanos Baleares.

Juan Antonio Horrach Moyá, copropietario de HM Hotels y propietario de la Galería Horrach Moyá, ha fallecido tras sufrir un ataque al corazón cuando se encontraba viendo a su hijo en el hipódromo de Toulouse (Francia). En un comunicado a través de las redes sociales, su familia ha señalado que su figura quedará siempre ligada al fomento del arte, del trote y del turismo de calidad en Mallorca. Durante los próximos días su féretro será trasladado a Mallorca y se comunicarán las honras fúnebres que se lleven a cabo por su eterno descanso, han explicado.