Ahora, tras un año de trabajo de recuperación y ampliación de las recetas que se encontraban en la publicación, la editorial de Font acaba de lanzar una edición crítica, revisada y ampliada.
Se trata de un recetario de principios del siglo XX cuya autoría es anónima, si bien «en la propia portada del libro se especifica que fue realizado por varios cocineros de casas principales de Mallorca», explica Font, quien asegura que «muchas recetas estaban por completar, o incluso faltaban algunos procedimientos que parece que ya se dan por entendidos».
«La razón por la que he decidido publicar el libro ahora se debe a dos factores», indica Font. «El primero es porque con este ejemplar completamos la trilogía de recetarios típicos después de la publicación de Cuina popular de Mallorca (Sóller, 1931), de 2007, y La cuinera pràctica (Felanitx, 1935), de 2009», y la segunda, «porque sólo se ha encontrado un ejemplar y creo que vale la pena recuperarlo». Además, Font también señala su importancia en cuanto a «cultura popular y gastronómica».
De las 127 recetas que conforman el libro, «el 85 por ciento se refieren a dulces», y el resto son «la mayoría de carne y un par de pescado».
Sorprende que ninguna receta incluya ingredientes tan típicos de la Isla como la sobrasada. Entre las más llamativas que destaca Font, por ejemplo cita «la leche florentina, el ponche o huevos moles.
Las recetas, añade, «no siguen un orden lógico de agrupación y algunas de ellas proceden de la Península, de Europa y, sobre todo, hay mucha cocina conventual».
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