El Auditòrium de Palma fue ayer el escenario del tradicional Encuentro de Bandas de Música de Palma, que este año cumplió su vigésimo séptima edición. La actividad estaba incluida dentro de los actos de conmemoración de Santa Cecilia que organiza el Ajuntament de Palma. En total, participaron en el evento cerca de 250 músicos entre profesionales y aficionados, la mayoría jóvenes de entre 16 y 18 años, en lo que se convirtió en la reunión de bandas más importante del año. El repertorio fue de lo más variado y recorrió diferentes estilos y épocas musicales.
Los primeros en salir a escena fueron la Banda Unión Musical de Son Cladera, que interpretaron un pasodoble de García, Félix Rodríguez, y Highlights from, de Ulvaeus y Andersson. Después fue el turno de la Unió Musical Nostra Terra de Son Ferriol, que tocaron Puenteareas, de Soutullo; Un americano en París, de Gershwin; y Mar i Be, de Ferran. Más tarde actuó la Societat Musical Instructiva Santa Cecília de Son Rapinya, con un programa basado en Lo Cant del Valencià, de Pedro Sosa, y Recull Popular Balear, de Salvador Brotons.
La Banda de Música de s'Almudaina optó por El arte de cuchares, de Pastor, y por Júpiter, de Holst, mientras que la Agrupació Musical del Camp Rodó se decantó por Certamen musica, de Dorado, y Robin Hood, de Kame. La Banda Municipal de Música de Palma fue la formación encargada de cerrar la velada interpretando la suite sinfónica de Rimsky-Korsakov Scheerezade. El grupo, dirigido por Juan Giménez, se centró en los actos tercero y cuarto, que tratan los temas El joven príncipe y la joven princesa y Festival en Bagdad. El mar. El naufragio.
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