TW
0

Jugar a hacer arte, enfrentarse a un bloque de 1'20 x 1'20 x 2'50 metros de mármol de Carrara y convertirlo en una obra. El I Simposium Internacional d'Escultura a Mallorca (Siema) arrancó ayer por la noche en la Plaça Major del Poble Espanyol con la intención de acercar al espectador el proceso de creación de ocho autores. Morgana, Kim Hyung-Pyo, Olli Mantere, Filippo Tincolini, Simone Zanaglia, Pier Giourgio Balocchi, Antoni Capó y Sibylle Pasche transformarán, durante 15 días, el mármol en una escultura en el Poble Espanyol.

Un numeroso público acudió al acto que empezó con las chicas de Ciutat Dansa. Las bailarinas escenificaron una coreografía amoldada al espacio que combinaba pases de baile clásicos con contemporáneos. Sus movimientos se unieron a la música de Scarlatti, de Josep Maria Amiot y de Miquel Àngel Aguiló. Éste último se encargó del chelo. Las cuatro chicas danzaron en torno a cuatro bloques de mármol tapados con telas, la materia prima de la que surgirán las esculturas, descubriendo, al final, las piezas. Sus gestos escenificaban diferentes momentos del proceso de creación artístico.

El montaje de danza dio paso a las palabras de Jeroni Bosch, director del simposium, y de Carme Feliu, regidora de Cultura del Ajuntament de Palma. Después se inauguracó una exposición en la Iglesia de Torralba en la que se muestran piezas de los ocho artistas que participan en el Siema. La intención: enseñar las particularidades de cada uno de los escultores. La manera: convirtiendo la obra en protagonista.

Los diferentes estilos de cada uno de los autores se separan mediante cortinas. Para lograr un ambiente íntimo se ha oscurecido la iglesia tapando los rosetones y los accesos de luz. De esta manera, el espectador, al entrar en el lugar, se encuentra directamente con la obra.