La Orquestra Simfónica Ciutat de Palma, en 1999.

TW
0

La «Mascarada», de Aram Khatxaturian, y la «Sinfonía número 7», de Prokófiev, sonarán esta tarde en el auditorio del Conservatorio para celebrar que la Orquestra Simfònica Ciutat de Palma ya cuenta con una publicación en la que se recopilan sus primeros 10 años de historia. Gabriel Sabrafín es el autor de este trabajo en el que se ofrecen datos sobre el conjunto instrumental y las actividades musicales que surgieron a su alrededor como la creación de grupos de cámara o premios.

Desde septiembre de 1989 al mismo mes de 1999, Sabrafín ha recogido todos los conciertos ofrecidos por la Simfònica, la relación de sus directores "tanto los titulares, Luis Remartínez, Philippe Bender y Salvador Brotons, como la larga lista de invitados" así como sus salidas por las islas, fuera de la comunidad autónoma o grabaciones. Tampoco faltan las corales, agrupaciones y solistas que colaboraron con la Orquestra. La portada de esta publicación, que surgió a iniciativa de la Fundació Pública per a la Música de les Balears, está ilustrada por el recientemente fallecido artista Pere Quetglas «Xam».

Para escribir esta historia, Sabrafín ha realizado una labor de investigación documental en los archivos de la Fundació y entre melómanos o personas con memoria histórica en un «trabajo intenso» que él describe como de «práctica normal en todas las orquestas para que su historia se ponga al alcance de investigadores y estudiosos». Además, el autor ha entregado a la Fundació el soporte informático en el que trabajó «con lo que cada vez que suceda un acontecimiento se pueden ir añadiendo los datos que estarán ya al día en todo momento», dijo.

Sabrafín, que formó parte de la Comisión Artística de la Orquestra, y fue crítico musical además de muy aficionado a la música clásica, conoce bien la historia de la Simfònica, que tiene sus antecedentes, como queda reflejado en el libro, en la antigua Orquesta Sinfónica de Mallorca que nació en 1947, y ha querido reflejar estos diez años «de manera objetiva», comentó. Para Carlos Rubio, gerente de la Fundació, el libro es un documento «necesario» y calificó la labor de Sabrafín de «magnífica».