La Escuela de Concejales y Concejalas de la DPZ comienza su segundo turno con ampliación de aforo. | DPZ

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La Diputación de Zaragoza ha comenzado el segundo turno de la Escuela de Concejales y Concejalas. Debido a la elevada demanda de esta iniciativa, se ha ampliado el número de participantes, pasando de 80 en el primer turno a los 95 que han participado este viernes en las clases.

Este curso de formación tiene el objetivo de que los cargos electos municipales se familiaricen con los temas más habituales en la gestión de sus ayuntamientos y se realiza cada vez que hay elecciones municipales, ha indicado la institución provincial.

«La experiencia es muy positiva, ya que ayuda a que quienes acaban de asumir responsabilidades municipales conozcan el funcionamiento de los ayuntamientos y el apoyo de la Diputación de Zaragoza», ha explicado la diputada delegada del servicio Cuarto Espacio de la DPZ, Cristina Palacín.

«Los alcaldes y concejales tenemos ante nosotros grandes retos, desde la digitalización, la despoblación, el envejecimiento y la dispersión de la población a la mejora de los servicios y la transparencia», ha expresado Palacín.

Así, además de incidir en la normativa vigente, el curso proporciona herramientas para mejorar la capacidad directiva y de liderazgo, pudiendo aplicarlas en una mejor gestión y organización municipal.

Palacín ha apuntado que este curso «también va dirigido a alcaldes y concejales ya experimentados, que llevan tiempo en el cargo, puesto que es necesaria la formación continua porque todos los años se aprueban nuevas leyes y nueva normativa».

Primer turno

El pasado 12 de enero concluyó el primer turno y este viernes ha comenzado el segundo, que se desarrollará, como el anterior, durante cinco viernes consecutivos, en horario de tarde, de 16.30 a 20.30 horas, y con clases que se imparten en la propia sede de la Diputación de Zaragoza. En total son 20 horas de formación.

La diputada provincial ha manifestado que la DPZ es «la administración más cercana y aliada con los municipios, sobre todo con los más pequeños, que trabajan el día a día con menos recursos económicos, humanos o técnicos; allí está siempre la Diputación para ayudarles».

Precisamente, esta Escuela de Concejales y Concejalas es un ejemplo del respaldo a todas esas personas comprometidas con el servicio público desde sus ayuntamientos y con el reto de dar respuesta a las necesidades del medio rural.